Durante el periodo 1964-1970, bajo la dirección de Héctor Valdés, la CORVI promovió el diseño de vivienda de interés social mediante Concursos Nacionales de Arquitectura. Esto llevó a una organización de los equipos de diseño en función de dicho encargo y la elaboración de 8 tipologías de vivienda en una primera etapa. Hiram Quiroga ocupó la vicepresidencia de CORVI en 1970 y bajo su conducción se construyeron diversos conjuntos basados en las tipologías antes elaboradas (principalmente C36, 197, 1010 y 1020), y se diseñaron otras 8 tipologías, revisiones ampliadas de las anteriores, más dos tipologías de viviendas de emergencia. Los conjuntos de vivienda CORVI estaban compuestos tanto por tipologías de vivienda extendida como por colectivos en altura (como la población Santa Julia en Ñuñoa), pero también podían considerar solo un tipo, como la población Antillanca en Osorno, compuesta sólo por colectivos 1020.

Los concursos aportaban ideas, pero a la larga encarecían los costos de las viviendas por lo que los diseños CORVI, que racionalizaron las plantas y los sistemas constructivos de las viviendas, resultaron ser más eficientes en tiempo y costo en la producción material de ésta, impactando positivamente en el número de unidades construidas. No todas estas tipologías fueron finalmente producidas, pero las que lo fueron definieron un momento significativo en la historia de la vivienda social chilena y, por su masividad, en la vida de nuestras ciudades.

En esta página exponemos y analizamos estos diseños, utilizando, entre otros, el documento “Tipologías de viviendas racionalizadas 1966-1972”, publicado por el Subdepartamento de Diseño CORVI en 1972 y que contiene información sobre cada una de las 18 tipologías elaboradas.